Resumen: La tecnología, en todos sus sentidos, ha dado grandes pasos en los últimos años y por supuesto la industria del concreto también ha vivido un gran desarrollo, los retos son cada vez mayores orientados hacia una mayor confiabilidad, durabilidad, versatilidad y productividad. El reto de la tecnología del concreto es proyectar estructuras de concreto capaces de lograr vidas útiles para las cuales son especificadas. Proyectos como túneles, puertos, edificios de gran altura, viaductos, entre otros, donde los requerimientos son cada vez más exigentes en cuanto a selección de materiales, diseño y producción de mezclas, sumado a procesos de colocación adecuados y competencia de personal. Todo esto ha llevado a desarrollar productos a la medida de los requerimientos de los proyectos de ingeniería, productos que aporten al desempeño requerido tanto en su proceso de colocación en cuanto a fluidez, tiempos de manejabilidad, entre otros y por supuesto a la durabilidad.